Seguidores

martes, 30 de diciembre de 2014

Y yo que creía...

...que mis vacaciones iban a ser de relax.

Ya tenía todo planeado para poder hacer cosas pendientes y además, tener cierto descanso para pasar en compañía con mi familia. Pero las Navidades iban a comenzar guerreras...

El primer contratiempo derivó de tener vacaciones a partir del día 13 -de Diciembre, claro- a ser retrasadas hasta el 22, que dices tú, pa' qué, pos' pa' nah', pero allí tuvimos que estar. Quieras que no, una semana es una semana y se nota, pero pasado el leve percance, esta vez sí empezarían mis vacaciones. Este año, retraso en los cobros y además sin cesta en casa. La crisis que lo llaman.

Unos días antes de mis vacaciones, una vecina tuvo un percance con el coche y éste quedó siniestro, aparte del susto de mi vecina y sus consecuencias físicas. Primer aviso -paga la coca xD-.

Segundo accidente, mi vecino, esta vez de otro portal, tuvo otro percance y tuvimos que ser desalojados porque era probable un daño grave en los cimientos de ese piso y aledaños. A la puta calle. Segundo aviso.

Tercer percance, accidente casero y mi vecino muy grave. No se sabe si saldrá. Con esto y la inundación del piso de mi vecina de al lado, esta vez puerta con puerta, espero que tengamos para una temporada. Lo de inundación fue literal. ¿Habéis visto la película de Jumanji? Pues igual pero sin el fallecido Robin Williams, que en paz descanse. Como podéis comprobar, las reuniones vecinales son de todo menos aburridas. Con la preocupación de mi vecino todavía en mente, mi padre llegó esa misma noche de una cena de empresa presumiblemente intoxicado o con una reacción alérgica por algo del menú. A urgencias, y de urgencias, al hospital con gotero...

Ahora sí, ¡vacaciones! Empezaría con la limpieza del Mac, que ya el pobre iba un poco ahogado. Eran 142'6GB libres de los 2.96'9GB totales. Ahora tengo 1.38'8GB libres, un poco menos de la mitad y, quieras que no, se nota. Por fin coloqué TODO lo que tenía en proyecto. Cada foto o vídeo está colocado por temas, los cuales a su vez están divididos en carpetas y subcarpetas. Todo muy T.O.C. Además, borré duplicados y por supuesto, tengo una copia de seguridad en el disco duro. No es imposible perderlo todo, pero al menos esta vez lo he puesto complicado. Me llevó más tiempo del que me hubiera gustado, pero fue la primera y principal cosa que tenía pendiente para estas vacaciones de Navidad.

Ahora me tocaba coger una tarde -bueno, dos- para hacer croquetas. Me pasé la tarde con ellas, porque sí, muy ricas y todo eso, pero como bien dice mi madre, muy entretenidas... Primera parte lograda. Además, hice fotos del proceso, que mucha gente me ha pedido la receta y me apetecía escribirla un día en el blog. Las fotos salieron un poco oscuras, es lo que tiene hacerlas con el iPhone sumado a que a las seis de la tarde ya casi sea noche cerrada. Odio el invierno.

Parte dos, el segundo día de croquetas lo aproveché para ir Madrid. Lo tenía tan pendiente que casi se había convertido en obligación. Allí vi algunas cosas que le pude escribir en la lista a Papá Noel y, ¡SORPRESA! El gordito barbudo me las trajo. :) Lo raro es que me haya desaparecido también el dinero justo que cuestan esas cosas además de lo que cuesta un viaje de ida y vuelta a Madrid... Cosas raras que me pasan. Una vez reposó la bechamel y después del viaje, nos tocó ponernos a rebozar croquetas.

¿Os gusta el árbol de este año de la Puerta del Sol?

Ahora tocaba recoger a mi abuela para que pasase la Navidad y también acercarme a visitar a mis otros abuelos. Y bueno, ya que estábamos, sintonizarles la tele, que ni siquiera podían ver Telemadrid (claro que, para lo que echan...). Que oye, se verán más canales ahora que hace unos años, pero joder, anda que no nos hacen trabajar. Que si sintoniza, que si luego vuelve a sintonizar, que si los quitamos, que si ahora los quitamos otra vez, que si mejor no, mejor en Marzo que no nos ha dado tiempo...

Justo la mañana de Navidad, el día dedicado a Papá Noel, pasó algo que esta vez me afectó de lleno. No puedo decir qué es. No es algo grave, yo estoy 'bien', pero es algo que jode MUCHO. Y me cago en toda la mala gente del mundo que sólo se dedica a hacer daño a otras personas. Hoy por la mañana, dentro de unas horas sabré si la resolución de todo esto que ocurrió tiene un efecto relativamente positivo o por el contrario, lo tiene negativo. Si ocurriera lo segundo, estas Navidades se las dedicaré a toda la gente mala que existe en este mundo, que no es poca. Desde aquí os deseo que todo lo que hagáis o penséis y que repercuta negativamente en los demás a sabiendas de que estás haciendo algo malo, se vuelva contra vosotros con el doble de fuerza. Amén.

Así que con este panorama, no me ha dado tiempo a hacer mucho más de toda la lista que tenía. Ayer intenté imprimir unos mensajes de diversas marcas a las que escribo para saber si etiquetan bien sus alimentos dado mi problema con las alergias. Me he quedado sin tinta en la impresora. Si es que cuando no...

Con respecto a los borradores que tengo en el blog a la espera de ser publicados -bah, sólo son 48 xD- espero poder hacer un 'especial muestras' antes de que lleguen más. Por lo menos en el Facebook sí que estoy al día, que todo no se puede.

Espero que comprendáis que esté un poco perdida estas Navidades, pero es que yo no sé qué tipo de mafia organizada se ha puesto de acuerdo para echarme mal de ojo. Lo único que sé es que se les da cojonudo. Sea como sea, aunque me quede mal sabor de boca, este año he conseguido tachar algunas de las cosas que tenía en ese álbum de Facebook llamado 'Cosas que siempre quise comprar'. Y que oye, si alguien se anima a comprarme las demás, no le diré que no... Lo de pasarme por WhatsApp más a menudo, o lo que viene a ser pasarme sin más, va a tener que esperar.

Por cierto, ¿seguisteis el recorrido de Papá Noel en Google? ¡Yo sí! Y bueno, aunque todos me tomaban por loca (ejem...) hice capturas de pantalla de cuando estuvo por España. ¿No me creéis?

Aquí le tenemos en África, camino de subir hacia los Pirineos. :D

Aquí ya en Cataluña, con 4,824,596,435 regalos entregados. Los míos estaban aún en el saco... :)

Y aquí me había dejado ya los regalos. O eso se suponía... Fui a comprobarlo por si acaso...



¡Y sí! ¡Allí estaban! Ya era un poco entrada la madrugada, pero tal y como Google predijo, los regalos de Madrid ya estaban repartidos. Cada año que pasa soy más buena, así que creo que no hace falta decir por qué tenía tantos regalos...
¡Una Volkswagen radio y MP3! El colmo de los colmos, Volkswagen mezclado con música. Oh Dios mío, una perdición... Me ENCANTAN esas luces de papel con forma de estrella. Hacía mucho tiempo que quería una y no me pude resistir. Las zapatillas son súper calentitas, tengo un proyecto pendiente yo con este tipo de zapatillas. Y hasta aquí puedo leer. xD Y mi tarjeta regalo. Esa la gané a través de internet, pero me llegó el día de Navidad. :)

No sólo es bonita, además es súper calentita... Mi nueva bata pingüinera. :) Estoy súper feliz con ella. 


 Un par de postalicas, una de Car y la otra de Isa. ¿Os gustan? :)


¡Y mi llamador de ángeles! Lo quería desde hace años cuando una vecina le regaló uno a mi madre por un favor -que en realidad hicimos a medias mi madre y yo, pero pseeé, mi vecina eso no lo sabía y aunque mi madre me dejara el suyo...-. Ya es mío.

Papá Noel me trajo ilusión. Falta me hace...

Y la máquina de chicles, que la tengo desde un poco antes, pero que es otra de esas cosas que siempre quise y aún no tenía. 

Estoy feliz con mis regalos. :)

lunes, 15 de diciembre de 2014

Camiseta Healthy & Tasty, Teresa Carles

Últimamente me siento Juan Palomo, yo me lo guiso, yo me lo como... ¡Y es que no paro! 

Hace ya un par de meses -y medio- que comencé en el nuevo trabajo y la verdad es que a pesar de todo lo que implica para mí el apenas cobrar, pasar taaaanto frío, tener que estar tantas horas fuera -desplazamientos incluidos- y también ser un trabajo tan social, he de admitir que me gusta todo lo que podría llegar a gustarme un trabajo así. A pesar de eso, muchas veces me siento baja de moral al pensar que podría pasarme como en el sitio anterior y que esto es aún más probable si la gente comprueba que no soy capaz de avanzar o al menos no lo hago a la velocidad que ellos esperan. Pero bueno, mientras tanto, sigo recorriéndome los pueblos de la comunidad madrileña que aún no conocía, vuelvo a visitar otros que ya visité y hasta aumento mi curriculum. ¿Lo malo? Estas Navidades me va a tocar estar al pie del cañón exceptuando los días clave de las Navidades, lo cual supone menos tiempo libre, pero algo más de dinero en mi hucha -porque lo que gano no da ni para monedero, hucha de lata-.

Perdonadme por tanto que os vuelva a reportar a aquel 30 de Septiembre al que os remontaba en mi última entrada del blog, Muestra de Nestlé -peluche incluido-; pero aquel día tuve premio doble, muestra con regalo y también muñeca chochona... 

Hacía unos días, no recuerdo exactamente cuántos, había participado en un concurso del restaurante Teresa Carles en el que, si no recuerdo mal, te preguntaban algo así como qué te gustaría encontrarte en un restaurante cuando fueses a comer. Qué tipo de plato, qué tipo de novedad, qué originalidad, qué receta, ¿qué te gustaría? Viendo que era un restaurante respetuoso con las dietas, vegetariano de referencia, cocina innovadora, sana, para todos los bolsillos... Contesté basándome en ello y en mis gustos y problemas personales: me gustaría un restaurante en el que poder comer con mis alergias. Que no todo fuese apto (a ver, soy alérgica, pero entiendo que las demás personas también tendrían que comer allí puesto que es un restaurante normal y también acepto que no puede haber un restaurante para alérgicos al huevo, otro para alérgicos a los frutos secos, celíacos...) pero en el que pudiese pedirme un postre y me lo pudiesen servir sin decirme que no hay nada que pueda tomar. ¡Y gané! 

Bueno, no fui la única, hubo otras 19 personas que ganaron conmigo, pero... A todos y cada uno de los 20 que conseguimos ganar el sorteo, nos enviaron a casa la camiseta que elegimos de la tienda Teresa Carles shop

Y mira que tenía ganas de escribir esta entrada, además de porque me apetecía mostraros la camiseta, porque me apetecía compartirlo también con Teresa Carles. Ya que era un poco tarde para sacarme una foto de la camiseta puesta -ya sabemos que en España tenemos dos estaciones: qué puto frío y qué puto calor y en esos momentos estábamos ya en el qué puto frío en Madrid- al menos os dejo la entrada para que podáis ver la camiseta. 

Y ya de paso, os dejo todas sus direcciones web, que tienen para elegir. Tengo muchos amigos en Cataluña, así que si a alguno le apetece probar algo nuevo, ya sabéis:


¡Prometo usarla mucho este verano que viene!






Y lo mejor de todo es que me vale, cosa rara para ser una mediana... :)